El poder esta dentro de ti. (cuento)

Quiero dedicar este  relato  a un compañero de camino, con el que he tenido el honor de caminar y de poder compartir una bonita experiencia, que me ha permitido  verme reflejada  en él  y darme cuenta de que cuando verdaderamente  deseamos sanar, nuestro hermoso universo como por arte de mágia nos pone en el camino a las personas adecuadas  para que podamos  aprender y seguir creciendo.

Gracias.

En un boque muyyy pero que muy lejano vivía una peculiar criatura.  No era un ser como los demás, tenia el tamaño de un gigante, su cuerpo era de metal, un metal oscuro y muy pesado, pero tenia una nobleza inigualable. A pesar de todas sus cualidades, se sentía muy triste porque aunque estaba en un precioso i mágico lugar, no podía salir de allí porque una de sus piernas  estaba encadenada a un gran poste de hierro que le obligaba a estar allí atrapado todo el tiempo y lo único que podía hacer era dar vueltas y más vueltas por todo aquel espacio sin poder ir a ninguna otra parte. Cada día se sentía más aburrido y desanimado, pero seguía atrapado en ese lugar porque pensaba que de esa forma nunca le faltaría el alimento.

Pero un día ocurrió algo inexplicable, pues resulta que una mañana al despertar, se dio cuenta que la cadena que tenia en su pié, como por arte de magia se había soltado y se dio cuenta de que podía salir de allí. Dudó unos instantes, pero de pronto y aún sin saber a donde iría, de forma inesperada empezó a correr a la velocidad de un rayo. Estuvo corriendo horas y horas, hasta que  empezó a sentirse muy cansado y hambriento, sus fuerzas se agotaron y calló rendido en la mitad de la noche.

Entró en un sueño muy profundo y su espíritu le mostró sus miedos y sus dudas, pero de pronto algo mágico pasó. Se le apareció un gran mago con  vestiduras blancas,  larga cabellera negra que cubría toda  su espalda y una bella y larga dorada barba, también llevaba una especie de bastón del que salía una especie de  rayo de luz de uno de sus extremos. ¿Por qué dudas? ¿Por qué tienes miedo? le preguntó el mago a el  peculiar Ser. Y el  maravillado por tal aparición le contesto: porque donde antes yo estaba, me sentía encadenado, triste y soportando una carga muy pesada, pero tenía para comer. Lo que he decidido ahora me hace  libre, pero no sé si tendré el alimento necesario para vivir y entonces siento mucho miedo porque no sé si me he equivocado.

Entonces el mago en un tono de voz muy suave le dijo, el pasado, solo es una ilusión, una experiencia de vida y un aprendizaje muy valioso para ti, pero lo que has decidido ahora es una experiencia mucho más intensa y que te llevará a descubrir cosas nuevas que te ayudará  a crecer. No tengas miedo, lo que has decidido también es bueno aunque te falte esa seguridad que necesitas. Entonces el mago tomo su bastón mágico y toco con la punta del mismo la cabeza de ese ser y le dijo: yo te envío la seguridad que necesitas para este nuevo viaje que has decidido realizar pero además hoy desaparecerán para siempre todas tus cargas y todos tus miedos. De pronto un rayo de luz muy hermoso y brillante empezó a salir del bastón e iba iluminando más y más a ese extraño ser y aunque no podía comprender nada, se sentía  maravillado por todo aquello que estaba ocurriendo. El mago le preguntó ¿dime como te sientes ahora? Y el Ser le respondió muy bien, me siento muy bien. Mañana al despertar le dijo el mago, ¡tendrás una gran sorpresa te lo garantizo!  ¡descubrirás que eres totalmente diferente!  Entonces el mago se fue alejando lentamente hasta que desapareció por completo en la espesura de la noche.

A la mañana siguiente el ser extraño despertó, se puso en pié y se dio cuenta de que ya no tenia miedo, el miedo como por arte de magia había desaparecido, pero también se dio cuenta de que ya no tenia dudas. De pronto dirigió su mirada hacia el horizonte y tuvo una gran sorpresa, pues un inmenso valle de hierba tierna y verde  tenia justo delante de él.  Un río precioso de agua fresca y limpia cruzaba todo el valle. Sin demora se acercó al río para saciar su sed y de pronto  ¡Ho sorpresa! su cuerpo de hierro tan pesado había desaparecido como por arte de magia y se había convertido en un precioso, libre y veloz caballo blanco. Y entonces se dio cuenta de lo afortunado que era por haber recibido todos aquellos regalos. Era tan inmenso lo que experimentaba y se sentía tan afortunado, que a partir de aquel día siempre escuchaba una voz interior que le decía  confía confía confia.

                                                                                                                             Montse Torres